El balance en España del primer cuatrimestre del año en términos de comercio exterior es muy positivo: (i) las exportaciones muestran un elevado dinamismo (+9,8%), superior, incluso, al de los países de nuestro entorno (+7,2% en la UEM), (ii) en volumen el crecimiento de las ventas al exterior duplica al de las compras (+9% vs +4,8%), y (iii) el déficit no energético se redujo casi un 90% hasta apenas 20 millones de euros.
No obstante, los datos de abril fueron negativos, con el déficit creciendo al mayor ritmo en tres años (+88,8% interanual), fruto de la caída de las exportaciones (-2% vs +0,5% las importaciones), si bien estos registros están muy afectados por el distinto calendario de la Semana Santa: en términos desestacionalizados y corregidos de calendario se contabilizan aumentos del 7,5% y el 10,7%, respectivamente. El deterioro de las exportaciones se explica, básicamente, por la caída de las ventas de automóvil, en especial las destinadas a Reino Unido, Francia y Alemania. Entre las importaciones, siguen destacando las energéticas, sobre todo las procedentes de Arabia Saudí, Irak y Noruega.